No soy la voz de tu conciencia pero si no estás dispuesto a cambiar, si no estás dispuesto a tomar partido, si solo quieres ser un espectador, por favor, deja de visitar esta página.
Desde hace un tiempo he tenido la sensación de que solo existen dos tipos de navegantes en Internet:
- Los que leen tus artículos y no hacen nada.
- Los que leen tus artículos, escriben un comentario de apoyo y no hacen nada.
Lo que resulta muy frustrante en alguien que espera cambiar el mundo o al menos su mundo.
Sin embargo, más frustrante aun es ver como la mayoría de la gente no está comprometida, prefiere perder derechos antes que leerse una ley o reforma y, peor aun, la inmensa mayoría de la gente se ha apuntado al movimiento anti-canon como en las demás iniciativas y partidos, no porque esté sinceramente convencida de los ideales que representan, sino por el sentimiento de pertenencia al grupo. Pero ¿de qué sirve escribir un comentario insultando a la sgae sin saber por qué lo haces?, ¿qué sentido tiene atacar a la ministra de cultura sin entender cuáles son los motivos?. Sentir tu pertenencia al grupo: algo habrás leído y te habrá parecido bien, pero si tus actos no son el reflejo de la firme convicción de tus ideales, si no te has informado, si no te has mojado, ¿qué valor tiene lo que haces?. Ninguno.
Tal es así que estoy seguro de que en tu navegador y en tu mente las noticias acerca del futuro corte de Internet, la no-presunción de inocencia, la no-separación de poderes y el pisoteo del secreto de las comunicaciones están exactamente a la misma altura que las del anuncio de avatar, las novedades de apple o la próxima jornada de liga.
Consecuentemente, no debemos confundir lo propio con lo común: aunque me gustaría infinitamente que fuera así, los derechos no deben ser algo anacrónico: no debemos tener derechos si no estamos dispuestos a defenderlos, y aunque esta sociedad hoy habla más que nunca de ellos, solamente habla y me aventuro a decir que no votará en consecuencia y que, tristemente, no acudirán en masa a las manifestaciones convocadas esta tarde a las 20:00.
A propósito de la futura ley de economía sostenible, muchísimos ciudadanos informaron de los peligros que suponía la lssi, aquí hablamos de ella y muchísima gente antes y después también avisó sobre el peligro. Pero de qué sirvió que lo escribiera si tú no hiciste nada. Esta reforma, si se aprueba tal como está, acabará con el derecho a la privacidad y hará que webmasters, usuarios y adminsitradores no puedan acceder a la mayor fuente de información jamás creada libremente.
Y es que la reforma, aunque afecta a Internet, se está llevando a cabo en la vida real, y aunque la protesta debe existir en Internet, debe ser igual o más contundente en la vida real o no ser (huelga decir que siempre hablo de medios pacíficos y legales).
La gente, pero sobretodo el gobierno, debe comprender que la sgae, las discográficas y los editores forman lobbies para conseguir todo aquello que les es útil, y que si ahora les concedemos esto no tardarán en pedir más y más. Al fin y al cabo, ya les concedieron una extensión del canon y ahora demandan esto. ¿Hasta dónde podemos llegar?, hoy en día existen casos insultantes como lo que ocurre en estados unidos, ya que para un lobby nada es suficiente y todo es poco.
Hablando ahora con miras al futuro, hay quien sabe cómo cifrar las comunicaciones u ofuscarlas para que el día de mañana esta ley no le afecte, la cuestión es, ¿lo sabes tú?, y sobretodo, ¿prefieres dar un paso en favor de tus derechos ahora, o buscar apresuradamente cómo hacerlo una vez te encuentres en la ilegalidad?.
En todo caso, apoyo completamente lo expresado en el manifiesto y añado, cuando el gobierno lo apruebe (algo que tarde o temprano hará), el derecho de copia privada quedará tan recortado que el canon no tendrá ningún sentido y, si son coherentes, los ministros deberán eliminarlo como debieron hacer cuando empezaron a adoctrinar sobre la piratería con fondos público.
Se que hoy en día es predicar en el desierto pero la única solución a todos estos problemas pasa por tomar medidas en el mundo real: manifestarse públicamente y sobretodo no debemos ir al cine de las grandes productoras, comprar discos de las grandes discográficas, comprar libros de las grandes editoriales y a pesar de la moda: no, no y no a spotify, porque cada céntimo que te gastes y cada anuncio que muestren les proporciona fondos para luchar contra tus derechos.
Y por supuesto: sí a la cultura de pequeños, jóvenes y desconocidos autores, sí a los festivales y conciertos, sí al dominio público, sí a la cultura libre.
disculpenlasmolestias.com
